• Diferentes entidades presentaron los resultados para combatir la delincuencia 

En el Concejo de Pereira se discutió un tema de gran sensibilidad para la comunidad como es la inseguridad ciudadana y delitos conexos como el tráfico y consumo de estupefacientes, crecimiento de bandas criminales y ausencia de luminarias de la ciudad. 

La coronel Alexandra Díaz Gómez, comandante de la Policía Metropolitana de Pereira, presentó un informe con cifras que confirman los esfuerzos de la fuerza pública para la contención y prevención de delitos y para mitigar los hurtos. 

La Secretaria de Gobierno de la ciudad, Karen Zape, anotó que se han desarrollado acciones interinstitucionales de reacción y prevención que han arrojado importantes resultados operativos. “Somos conscientes de las dificultades de delitos de alto impacto, pero no se puede desconocer los esfuerzos humanos, técnicos y económicos, por mejorar la seguridad en la ciudad y salvaguardar la vida de los pereiranos”, anotó la funcionaria. 

La secretaria de Desarrollo Social, Ángela María Rubio, mencionó que se han realizado 60 recorridos en 4 cuadrantes de la ciudad, para el control de habitantes de calle. A la fecha se han caracterizado a 1.321 habitantes, algunos de ellos son atendidos en el albergue urbano y luego pasan voluntariamente al albergue en Combia.  

Pese a los resultados presentados por las autoridades, los concejales de Pereira coincidieron en afirmar que la inseguridad llegó a su límite y es necesario conformar un frente común para contrarrestar los hechos delictivos y mostrar resultados positivos 

Los corporados también señalaron que se requiere desarrollar estrategias efectivas para frenar el incremento de los habitantes de calle en la ciudad y devolverlos a su lugar de origen. También es prioritario mejorar la reparación de luminarias públicas en sectores que están oscuros y generan percepción de inseguridad. 

Agregaron que la comunidad está cansada del alto consumo de droga en parques, plazas y las calles céntricas de la ciudad que se genera, en gran medida, por la falta de programas sociales especialmente dirigidos a los jóvenes para que no caigan en este flagelo. 

Los concejales de la ciudad también pidieron mejorar la línea 123 de la Policía porque no funciona de manera eficiente y la capacidad de respuesta es muy lenta. En definitiva, se requiere devolver la percepción de seguridad a la ciudadanía con acciones contundentes y efectivas.