Los conferencistas que participaron en el foro firmaron un pacto mediante el cual se comprometieron a mejorar las condiciones en las que se atienden a los pacientes, considerándolos como seres humanos y no simplemente como una cifra más en las estadísticas de salud. 

El Concejo municipal de Pereira fue el escenario para la realización del segundo foro sobre socialización, análisis y debate de la situación real de la atención en salud en la capital risaraldense, convocado por el concejal Mauricio Noreña. 

El evento contó con la participación de diferentes entidades públicas y privadas relacionadas con el sector de la salud, universidades, organizaciones médicas, de enfermería y la Personería municipal. Con todas estas entidades se hizo un llamado a que los prestadores de salud realicen su labor con un sentido humanitario y de mayor respeto por el paciente. 

Para el concejal Mauricio Noreña, expresó que en muchas oportunidades el personal administrativo y médico no atiende bien a los pacientes por estar pendientes de otros asuntos. "El enfermo dejó de ser Don Juan o doña María para convertirse en el enfermo de la cama 14; por eso debemos trabajar por el mejoramiento de la calidad de prestación del servicio alrededor de la humanización".  

El corporado mencionó que su propósito es sembrar el proceso para que los demás concejos municipales del país adopten esta medida y que se eleve a calidad de ley la humanización de la salud en todo el territorio colombiano. El concejal anotó que como parte del Proyecto de Acuerdo No. 45 de 2017 los conferencistas suscribieron el pacto municipal por la salud, como una manera simbólica de establecer un compromiso con el mejor trato a los pacientes.  

A través de videos y otras piezas audiovisuales, las entidades participantes presentaron sus experiencias de humanización de los pacientes, lo que demuestra que las entidades de salud se preocupan por el usuario y por brindarles una adecuada atención. 

Los firmantes de este pacto se comprometieron por mejorar las condiciones necesarias por una salud de alta calidad, llena de valores, principios éticos, con calidez y sentido humano, enfocado en las personas y no en las cifras, cualquiera que sea la condición social o económica y sin importar el régimen en que se encuentre el paciente, su padecimiento o estado de salud.